Por fin, tras trece partidos sin ganar, desde aquel encuentro en la jornada 8 frente a la Real Sociedad, el Real Zaragoza volvió a sumar tres puntos de vez en su casillero. Al igual que Aguirre o Gay, Manolo Jiménez obtuvo la victoria en su sexto partido como entrenador Del club maño.
Lolo arriesgó modificando drásticamente el once con el que se suponía iba a asentar las bases del equipo. En la defensa sentó a Paredes, que no estaba jugando mal para reubicar a Lanzaro como central y poner a Pablo Álvarez en el lateral derecho. Dujmovic, poco acertado en el último partido, vio como Pintér se hacía con su puesto. Por último Edu Oriol se incorporaba al once en lugar de Micael, al que no se le vio tirar del carro frente al Rayo.
En la primera parte el Real Zaragoza se plantó serio y concentrado, pero las mejores oportunidades fueron de parte del Español, Kalu Uche tuvo las más claras antes del descanso. Un mal remate tras estrellar Coutinho un balón en la madera y un disparo que se largó por encima de la portería de Roberto estando sólo en el punto de penalty.
Y aunque la segunda parte comenzó como terminó la primera, con el equipo maño presionando la salida del balón rival, juntando las líneas, creando un partido tosco, espeso para la retina del espectador y con el Español teniendo las ocasiones más claras. Romaric volvía a avisar disparando fuera un balón aéreo que se colaba en las cercanías del área pequeña. En el minuto 55 empezaba otro partido totalmente diferente, remataba Da Silva un centro de Luis García a la salida de un corner adelantando al conjunto maño en el marcador. Inmediatamente el Español intentó hacer la replica con otro remate de Coutinho que se estrelló esta vez en el larguero.
Ahí fue cuando Manolo Jiménez aprendiendo de sus errores pasados, tomó cartas en el asunto. En el minuto 60 entra Micael por Luis García y rompe el partido, el luso más inspirado que nunca organizó el juego de ataque del conjunto aragonés, pases al primer toque, paredes, pases en profundidad. De sus botas sale el pase que Postiga no supo concretar estando solo delante del portero, balón que da al muñeco y el equipo que no sentencia.
Momento idóneo para hacer el segundo cambio, Zuculini por Oriol. El argentino sale con el objetivo de defender el resultado y evitar que el equipo retrase las líneas. Otro que tenía las instrucciones del técnico anotadas en su cabeza. Zuculini sale para incomodar la ofensiva rival, con el fin de crear el 2 contra 1 a todo oponente que lleve el balón en terreno zaragocista, recuperando el esférico la mayor parte de las veces.
El Español tenía claro su juego, los delanteros se abrían a los lados desplazando con ellos a los centrales y dando la oportunidad a la segunda línea para que entraran por el centro. La zaga no pudo encontrar el remedio a esa jugada y Roberto tuvo que ponerse el mono de trabajo para salvar al equipo. Entre las acometidas del Español, Lanzaro también dispuso de la ocasión de sentenciar, pero Casilla respondió con una gran parada al remate de cabeza del italiano.
En el 84 el entrenador andaluz juega su última carta, Juan Carlos sale por Postiga. También con las instrucciones bien claras: “Estás fresco, así que corre y no pares”. El sub21 debía presionar a todo defensor rival que llevara el balón.
Cuando todo indicaba que el 0-1 sería el resultado final y que el partido acabaría con una falta escorada a favor del Real Zaragoza en el campo rival, Micael, el más listo de la clase, saca rápido al ver el desmarque de Juan Carlos y este delante del portero no falla, 0-2 en el minuto 92.
Tres puntos vitales que esperemos no lleguen tarde en nuestro camino a la salvación. Además, destacar una vez más el trabajo del entrenador, por las decisiones que ha tenido que tomar esta semana al dar la lista de convocados y dejar fuera a cierto conocido suyo que aún necesita recuperar algo de forma, por arriesgarse en cambiar la alineación, son importantes las bases pero no son momentos para crearlas. Y felicitarlo también por su planteamiento, si creas un partido tosco y espeso, las jugadas a balón parado han de marcar la diferencia. !Chapeau para Lolo!
Lolo arriesgó modificando drásticamente el once con el que se suponía iba a asentar las bases del equipo. En la defensa sentó a Paredes, que no estaba jugando mal para reubicar a Lanzaro como central y poner a Pablo Álvarez en el lateral derecho. Dujmovic, poco acertado en el último partido, vio como Pintér se hacía con su puesto. Por último Edu Oriol se incorporaba al once en lugar de Micael, al que no se le vio tirar del carro frente al Rayo.
En la primera parte el Real Zaragoza se plantó serio y concentrado, pero las mejores oportunidades fueron de parte del Español, Kalu Uche tuvo las más claras antes del descanso. Un mal remate tras estrellar Coutinho un balón en la madera y un disparo que se largó por encima de la portería de Roberto estando sólo en el punto de penalty.
Y aunque la segunda parte comenzó como terminó la primera, con el equipo maño presionando la salida del balón rival, juntando las líneas, creando un partido tosco, espeso para la retina del espectador y con el Español teniendo las ocasiones más claras. Romaric volvía a avisar disparando fuera un balón aéreo que se colaba en las cercanías del área pequeña. En el minuto 55 empezaba otro partido totalmente diferente, remataba Da Silva un centro de Luis García a la salida de un corner adelantando al conjunto maño en el marcador. Inmediatamente el Español intentó hacer la replica con otro remate de Coutinho que se estrelló esta vez en el larguero.
Ahí fue cuando Manolo Jiménez aprendiendo de sus errores pasados, tomó cartas en el asunto. En el minuto 60 entra Micael por Luis García y rompe el partido, el luso más inspirado que nunca organizó el juego de ataque del conjunto aragonés, pases al primer toque, paredes, pases en profundidad. De sus botas sale el pase que Postiga no supo concretar estando solo delante del portero, balón que da al muñeco y el equipo que no sentencia.
Momento idóneo para hacer el segundo cambio, Zuculini por Oriol. El argentino sale con el objetivo de defender el resultado y evitar que el equipo retrase las líneas. Otro que tenía las instrucciones del técnico anotadas en su cabeza. Zuculini sale para incomodar la ofensiva rival, con el fin de crear el 2 contra 1 a todo oponente que lleve el balón en terreno zaragocista, recuperando el esférico la mayor parte de las veces.
El Español tenía claro su juego, los delanteros se abrían a los lados desplazando con ellos a los centrales y dando la oportunidad a la segunda línea para que entraran por el centro. La zaga no pudo encontrar el remedio a esa jugada y Roberto tuvo que ponerse el mono de trabajo para salvar al equipo. Entre las acometidas del Español, Lanzaro también dispuso de la ocasión de sentenciar, pero Casilla respondió con una gran parada al remate de cabeza del italiano.
En el 84 el entrenador andaluz juega su última carta, Juan Carlos sale por Postiga. También con las instrucciones bien claras: “Estás fresco, así que corre y no pares”. El sub21 debía presionar a todo defensor rival que llevara el balón.
Cuando todo indicaba que el 0-1 sería el resultado final y que el partido acabaría con una falta escorada a favor del Real Zaragoza en el campo rival, Micael, el más listo de la clase, saca rápido al ver el desmarque de Juan Carlos y este delante del portero no falla, 0-2 en el minuto 92.
Tres puntos vitales que esperemos no lleguen tarde en nuestro camino a la salvación. Además, destacar una vez más el trabajo del entrenador, por las decisiones que ha tenido que tomar esta semana al dar la lista de convocados y dejar fuera a cierto conocido suyo que aún necesita recuperar algo de forma, por arriesgarse en cambiar la alineación, son importantes las bases pero no son momentos para crearlas. Y felicitarlo también por su planteamiento, si creas un partido tosco y espeso, las jugadas a balón parado han de marcar la diferencia. !Chapeau para Lolo!
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