Salió de inicio Leo Franco, con Mateos, Lanzaro y Paredes de centrales, Abraham y Juarez por bandas, Ponzio con Kevin en el pivote, Lafita y Juan Carlos en las alas e Ikechukwu Uche como ariete.
Durante los primeros minutos y dejando alguna ocasión rival para el olvido, más bien por desorden defensivo nuestro que por garra de ellos, el juego del equipo maño estaba más organizado que en los encuentros anteriores, Kevin muy participativo daba coherencia a la posesión zaragocista, hasta que un desafortunado incidente le causó una rotura del tabique nasal. Ausente Pinter por molestias y Kevin por dicho suceso, no había sustituto alguno para esa posición. Aguirre tras unos minutos metió en el campo a Obradovic. El serbio fue el mejor del partido, con una total libertad ofensiva pudo dar lo mejor de sí.
Durante gran parte de la primera parte el Real Zaragoza dejó una buena imagen en el campo, se atacó a cuenta gotas pero con peligro, un par de contras de libro de Lafita y Juan Carlos pudo hacer que Uche metiera a los maños por delante en el marcador, pero el nigeriano no es el killer que Aguirre tanto solicita.
Abraham también fue de lo más destacado del partido, un jugador acostumbrado a la banda se dejó ver por el centro para intentar reconducir el balón a la portería rival, una faceta que escapa a sus obligaciones pero que sorprendió gratamente al equipo.
A partir del minuto 40 se acabó la tónica del partido, varios desbarajustes defensivos hicieron que el equipo inglés fuera tomando una mayor confianza, el descanso llegó en el mejor momento posible pero al regreso nada había cambiado. El Wolves acosaba y los maños no presentaban respuesta alguna, lo único salvable en defensa fue Mateos, quizás con Da Silva de compañero se vea otra versión distinta de la zaga, desde luego Lanzaro y principalmente Paredes no transmiten esa sensación de solidez.
Los goles del Wolverhampton llegaron en la segunda mitad, ambos de balón parado. Se ha pasado de una defensa alta con Jarosik y Diogo y un eficiente Contini a un solitario Mateos, el balón procedente de un saque de esquina y tras varios remates acabó entrando al cuarto de hora de la segunda parte. Con el Zaragoza aturdido llegó el segundo cinco minutos después, una falta bien lanzada por encima de la defensa en la que el portero no pudo hacer nada.
A pesar de meter en el campo a Braulio, Oriol y Ortí, no hubo llegada, el canterano pudo haber probado al guardameta en uno de los pocos contraataques que tuvimos, pero los nervios le jugaron una mala pasada y prefirió dar un pase sin precisión.
Varias conclusiones podemos sacar del encuentro, Lafita y Juan Carlos por banda dan velocidad y causan auténtica sensación de peligro. Kevin, a falta de otro jugador de similares características, es más que necesario, en 10 minutos pudimos apreciar un Zaragoza distinto. Uche es mejor que Braulio, más movilidad, más regate, pero carece de pegada. Efraín sigue sin aparecer. Paredes no es un central. A Abraham no parece que se le vaya a quedar grande la primera división. Joel sin minutos es difícil que demuestre algo. Y hay que trabajar mucho, pero mucho, los lanzamientos de falta desde la frontal, 4 tíos alrededor de un balón para dar en las rodillas a la barrera no es tirar una falta.
Vayamos poco a poco, algún detalle se ve. Con Gay la pretemporada fue satisfactoria y la temporada un desastre. La pretemporada es necesaria para coger tono físico, probar cosas, los resultados a penas tienen valor. Quedan dos semanas para empezar la Liga y mucho trabajo por hacer. Aún han de venir varios refuerzos, especialmente arriba, y habrá que ver que jugadores causan baja de aquí al comienzo. Es pronto para tomar ideas precipitadas y a pesar de un mal comienzo, todos hemos visto lo que es capaz de hacer Aguirre, yo sigo confiando en el técnico, la pretemporada aún no ha acabado.
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